domingo, 27 de agosto de 2017

Pape Cheikh: El fútbol a escondidas.







- Pape Cheikh Diop Gueye
- Nacido en Dakar (Senegal), el 8 de agosto de 1997
- Centrocampista
- Equipos: R.C. Celta de Vigo \ Olympique de Lyon \ Montañeros C.F. \ Solar F.C. \ R.C. Celta B.





- Muchos jugadores cometen locuras sanas para acabar cumpliendo su sueño de jugar al fútbol profesionalmente como hizo Pape Cheikh Diop, un gran centrocampista que pasó de jugar en la cantera del Celta a debutar en la élite del fútbol, además de jugar internacionalmente con las secciones menores de la selección española.

En España acabó haciendo su vida, sintiéndose querido por muchos amigos que fue encontrando en su paso por las diferentes ciudades en las que residió. La vida de Pape no fue fácil, y menos cuando uno tiene que tirar de mochila para buscarse la vida en algo tan complicado como es el fútbol.
Nacido en la capital senegalesa de Dakar, Pape guarda el recuerdo de un balón en su mente cuando solamente tenía seis años. Había nacido para jugar al fútbol, algo que hacía a escondidas como en su día llegó a reconocer. Y es que a su padre no le gustaba que le diera patadas a un balón, mientras su madre le exigía que se centrase en sus estudios.

- Su primer equipo fue el Solar F.C., el cual no actuaba como un club con todos sus papeles reglamentarios, sino como algo amateur y a nivel escolar que participaba en torneos. Esos fueron sus primeros pasos por el fútbol. Allí pasó cuatro años jugando al fútbol sin que su padre fuera consciente de ello, ya que cuando Pape fingía que se iba al colegio, se escapaba para practicar ese deporte que tanto le entusiasmaba. Junto a otros niños senegaleses aprendió mucho en su infancia futbolera, hasta que en 2011 decidió "arrimarse" a España para instalarse en la casa de su tío, quien residía en Tenerife. Después de un mes viajó a Palencia para ingresar en su primera escuela de fútbol. Allí hizo muchas amistades, incluso su primer amor, por lo que guarda muchos recuerdos bonitos de su estancia en Palencia, de donde se fue a La Coruña para jugar en el Montañeros una vez concluida su etapa formativa. Ese fue el paso previo del senegalés para entrar a formar parte del Real Club Celta de Vigo, después de tres meses en los que no tuvo suerte con las lesiones jugando con chavales con tres años mayores que él. Aún así, el mediocampista viajaría a Vigo, donde fue acogido con mucho cariño y tratado de manera muy especial. Se instaló en una residencia en incluso llegó a vivir en pisos compartidos, pero la suerte de Pape Cheikh estaba a punto de cambiar, y en las filas menores del Celta fue consciente de ello.

Desde su estancia en la categoría cadete demostró tener un don especial para jugar al fútbol. Con los equipos menores demostró tener mucho gol. Ya en 2014 conseguiría su primer título a nivel personal, conquistando la liga juvenil con el equipo celeste, con el que el joven africano tuvo un claro protagonismo.
Así fue subiendo peldaños por las categorías inferiores del club de Balaídos, sonando como una de las mayores esperanzas de futuro para todos los medios antes de llegar al equipo filial antes del curso 2014\15. Por entonces ya jugaba para la selección española juvenil.

Su paso del filial al Celta fue fugaz. Empezó a ver el fútbol de otra manera mientras despuntaba ante la presencia de compañeros con clase como Borja Iglesias, Samu Araújo, Iván Villar o Josep Señé. Con algunos de ellos llegaría a compartir experiencias en el primer equipo.
Pape jugó tres partidos con el Celta B y anotó un gol. Ya había entrenado con el equipo de mayores y solo era cuestión de paciencia llegar a formar parte del mismo, contando con su primera convocatoria el 10 de mayo de 2015.

- Aún no sería el momento de debutar en la máxima categoría, pero Pape ya podía presumir con sus compañeros del filial de haber asistido a un partido de Liga frente al Sevilla cuando Berizzo le convocó.
Al año siguiente siguió destacando con el Celta B antes de debutar oficialmente con el equipo principal. Pero para Pape ya había empezado la temporada de la mejor manera posible. Aterrizó en la concentración del Celta en Alemania con el título de campeón de Europa bajo el brazo, el cual obtuvo con la selección española Sub-19. Eduardo Berizzo convocó al senegalés para disputar varios compromisos amistosos durante aquel inolvidable verano de 2015, aunque lo mejor estaba por llegar.
Su estreno oficial con el Celta de Vigo llegaría el 12 de diciembre de 2015 como regalo adelantado de Navidad. El mediocampista africano tuvo algo más de cinco minutos para jugar un partido frente al Espanyol que acabó con 1-0 para los gallegos. Durante ese mismo curso 2015\16 aún jugaría cinco partidos más de Liga y otros dos de Copa. En ésta última salió de titular en los partidos de ida y vuelta, en los que el equipo olívico progresó ante Almería y Cádiz para plantarse en una semifinal de la que no saldría vivo ante el Sevilla.

Pape ya sabía lo que era jugar en Primera con el Celta, y el siguiente paso sería repetir pretemporada para entrar a formar parte del equipo de mayores definitivamente. Su dorsal sería en número cuatro. Entraría a formar parte de un equipo histórico que durante ese ejercicio 2016\17 afrontaría tres competiciones con cierto éxito: Liga, Copa del Rey y Europa League.

Pape Cheikh jugaría en dieciséis partidos de Liga y en dos de Copa. Seguramente guarde para siempre el recuerdo de su primer gol de celeste, anotado el 27 de noviembre de 2016 ante el Granada. Su tanto sirvió para sentenciar el partido por 3-1, ejecutando un disparo colocado nada más ingresar en el área rival que batiría al meta Ochoa.

Fue un gran año para el celtismo y para el senegalés, puesto que el equipo alcanzó las semifinales de la Copa del Rey y la Europa League, mientras que en Liga hubo un final bastante discreto. Pape fue partícipe de ese gran Celta que rozó el primer título de su historia, formó parte de una gran plantilla en la que figuraban hombres de la talla de Iago Aspas, Radoja, Sisto, Pablo Hernández y Guidetti, entre otros, aquellos que le recibieron con los brazos abiertos cuando el pivote africano ingresó en plantilla.

Pape Cheikh en un partido ante el Betis de su última temporada en el Real Club Celta de Vigo.
- Pape Cheikh es un mediocampista defensivo de gran talento, un pivote que puede actuar adelantado o más retrasado, según las exigencias del técnico. Sus pasos con el Celta le han llevado a ser el objeto de deseo de muchos clubes europeos, y la marcha de Berizzo propició la llegada de Juan Carlos Unzué, quien parece que no contaba con los servicios del senegalés. También el club se mostró abierto a aceptar cualquier oferta irrechazable para vender a una de sus mayores perlas de futuro, así que en el presente verano de 2017 empezaron a escuchar propuestas.

Con la temporada 2017\18 ya iniciada, los medios empezaron a hacerse eco de un posible interés desde Francia por el jugador. El Olympique de Lyon presentó una suculenta oferta por el jugador, y el 26 de agosto se hizo pública su transferencia al club galo, al que Pape llegará para conocer la Ligue 1, donde seguramente lo hará muy bien.
De esta manera, el mediocentro abandona una ciudad donde encontró mucho cariño. Pape se va de Vigo habiendo jugado un total de 27 partidos con el primer equipo, dejando en el recuerdo ese gol ante el Granada que puso en pie a todo Balaídos. Pape Cheikh ya no juega a escondidas, es más, todo el mundo será testigo de su impresionante calidad.

*Desde Fame Celeste me quiero unir al celtismo para agradecer sus servicios prestados al R.C. Celta de Vigo, y lo haré en wolof, lengua de su país natal: ¡Djëre djëff, Pape!.


martes, 22 de agosto de 2017

Álex López: El "Superlópez" de Narón.








- Alejandro López Sánchez
- Nacido en Ferrol (A Coruña), el 11 de enero de 1988
- Centrocampista
- Equipos: R.C. Celta de Vigo \ Real Valladolid \ Sporting de Gijón \ Racing de Ferrol \ Sheffield Wednesday \ Narón B.P. \ S.D. O Val \ R.C. Celta B.





- Su experiencia como jugador del R.C. Celta fue de lo más gratificante mientras el sueño duró. Álex López Sánchez pasó de jugar en clubes modestos a hacerlo en históricos como el Racing de Ferrol, Real Valladolid y su actual club, el Sporting de Gijón. También conoció el fútbol inglés en un clásico de la Premier League como el Sheffield Wednesday, pero fue con el club de Balaídos con el que llegó a jugar en la liga más importante del mundo tras ascender a Primera División en 2012 figurando como uno de los hombres más destacados de la plantilla.

En Vigo se le llegó a llamar "Superlópez" haciendo honor a aquel mítico superhéroe de cómic que tanto nos hizo reír otrora. Al personaje de tebeo no le solían salir bien las cosas, pero a este talento nacido en Ferrol (A Coruña) le salió todo de perlas, al menos hasta que llegó al fútbol de élite español, donde le resultó harto complicado dar la talla en un campeonato en el que competían jugadores como Messi, Cristiano Ronaldo, Griezmann y otros talentos mundiales.

Alex López debutó en Primera División con el Celta.
- No obstante, el mediocampista ferrolano nunca se amilanó en la exigente Liga Española. Álex tuvo bastantes apariciones en Primera con un Celta en crecimiento que años después dejaría de contar con sus servicios.
Su carrera juvenil se desarrolló en clubes modestos como el Hórreo, el San Pedro y San Rosendo, hasta que en 2002 llegó a la disciplina del Racing de Ferrol. Con el club departamental daría el salto profesional debutando en Segunda a los diecisiete años, en un partido frente al Tenerife que concluyó con empate a dos. Aún tendría tiempo a participar en un partido más de la división de plata jugando como titular en aquella campaña 2004\05. Al año siguiente jugaría cedido en O Val, ya que desde la entidad ferrolana se pensó que lo mejor sería darle minutos en categorías más bajas.
La calidad de Álex López se notaba desde lejos. Siendo un muchacho de mediana estatura con unas condiciones físicas tremendas, el ferrolano trabajó duro para llegar lo más lejos posible. Se notaba su técnica, su visión de juego, un gran toque de balón y la sed de triunfo que tras su paso por el Narón le conduciría a fichar por el Real Club Celta de Vigo en 2009. En el Narón estuvo dos años jugando en Tercera División a un nivel espectacular demostrando una calidad atípica que reunía grandes características como su potente chut desde fuera del área, algo de lo que llegó a hacer gala durante su estancia en el Celta.

En principio llegó a Vigo para jugar en el Celta B. No le haría falta mucho tiempo para llegar al primer equipo, un Celta con una plantilla muy gallega que en aquellos difíciles años presumía de poseer los mejores talentos del fútbol galaico, chavales trabajados desde las categorías inferiores y que en años posteriores acabarían jugando en Primera.

El acento gallego predominaba en aquel Celta de los Trashorras, Yoel, Roberto Lago, Hugo Mallo, Joselu, Iago Aspas y Oubiña entre muchos otros. El mediocampista de Narón sería otra de esas perlas gallegas que saltarían al equipo de mayores, dirigido durante el curso 2009\10 por Eusebio Sacristán, el gran valedor de la cantera celeste y quien depositó su confianza en muchos jugadores que años después darían sus frutos. Álex sería uno de ellos, quien a finales de la temporada contaría con su primera oportunidad durante un partido frente a la Real Sociedad en San Sebastián.

- Ya al año siguiente, Álex entraría en los planes de Paco Herrera, el siguiente entrenador que dirigiría un Celta con olor a Primera. El centrocampista entró a formar parte de una primera plantilla que en los dos años siguientes competiría seriamente por alcanzar el ascenso, objetivo logrado durante el curso 2011\12. Nuestro protagonista fue una de las claves de aquella gloriosa temporada. Asumió la batuta de la dirección del juego ofensivo celeste y cumplió con creces para festejar un ascenso que devolvería al equipo a la máxima categoría tras un lustro muy complicado.
Con el Celta en Primera, llegarían jugadores competitivos como Augusto Fernández, Krohn Dehli o Cabral. El equipo de Herrera empezaría a coger aires de grandeza, aunque el técnico catalán (quien más fuerte apostó por Álex) no acabaría la temporada en el banquillo. Abel llegaría en su lugar y salvaría al club de un descenso cantado en la última jornada. López contó con 33 apariciones en las que anotó sus dos primeros goles en la máxima categoría española, habiendo debutado en la misma el 18 de agosto de 2012 en un partido frente al Málaga en la que los andaluces salieron vencedores de Vigo (0-1).

Su participación con el Celta iría in crescendo al año siguiente. Al ferrolano no le afectó la llegada de Luis Enrique al banco celeste, que durante el siguiente ejercicio contó con el jugador en 31 ocasiones. Álex respondió positivamente marcando cinco goles más en la llamada "Liga de las Estrellas".
El Celta logró holgadamente la permanencia en un año muy dulce para su afición, y Álex ya pensaba en su próximo reto con el equipo vigués, que al año siguiente contaría con la presencia de un nuevo entrenador, un viejo conocido de la parroquia olívica que aún engrandecería más el nombre del club.

Con Eduardo Berizzo cambiaría mucho la película. Entre la conversión de Krohn Dehli y Augusto Fernández a mediocentros y la llegada de efectivos como el serbio Radoja y el argentino Pablo Hernández, Álex se quedaría sin protagonismo en el equipo titular.

En un Celta con aires europeos y una plantilla más competitiva, el ferrolano apenas tendría posibilidades de jugar. Durante la campaña 2014\15 participó en 25 encuentros de Liga, y en muchos de ellos jugó como suplente. Tuvo tiempo para marcar goles ante el Levante en Liga y en Copa frente al Athletic, pero su estancia en la escuadra celtiña estaba más que finiquitada.
Al año siguiente sería uno de los primeros descartes de Berizzo y se le buscó cesión. Finalmente se  marcharía a Inglaterra para jugar en la Second League con el Sheffield Wednesday. Después estaría en la segunda española jugando para el Valladolid de Paco Herrera, quien siempre le guarda un sitio en sus esquemas.

Durante sus últimos años en el club, Álex López pasó a jugar cedido en el Sheffield y en el Valladolid.

- Tras su regreso del club del Pisuerga hizo la pretemporada con el Celta de Juan Carlos Unzué, su sexto técnico en la disciplina celeste. Sin embargo, todos eran conscientes de que Álex nunca tendría hueco en la plantilla del equipo, a la que encima se sumarían los refuerzos del eslovaco Lobotka y Jozabed (el último ya estuvo cedido en la anterior campaña).

Se conoció el interés del Sporting a lo largo del verano de 2017, cuya dirección sería tomada por el propio Paco Herrera. Éste volvió a mostrar su entusiasmo en contar con los servicios de Álex López, quien se incorporó al conjunto asturiano para buscar un nuevo ascenso que le permita jugar una vez más en Primera División.
Después de ocho años como jugador del Celta, Álex se perdió las mejores vivencias del equipo durante el ejercicio 2016\17, en el que los de Berizzo acariciaron dos finales, la de Copa y Europa League. No obstante, el mediocampista de Ferrol ya puede presumir de haber jugado 89 partidos en Primera División.

viernes, 18 de agosto de 2017

Marcelo Díaz: El bicampeón americano.







- Marcelo Alfonso Díaz Rojas
- Nacido en Padre Hurtado (Chile), el 30 de diciembre de 1986
- Centrocampista
- Equipos: R.C. Celta de Vigo \ Hamburger S.V. \ F.C. Basilea \ La Serena \ Universidad de Chile \ Pumas UNAM.





- En año y medio se resume la relación de Marcelo Díaz con el Real Club Celta de Vigo. Es esta etapa se ha visto un jugador con clase y muy comprometido, un tipo trabajador que ha llegado a alzar dos títulos de la Copa América que ni el mismísimo Messi pudo conquistar con Argentina.
En Vigo coincidió con otros futbolistas de esa sorprendente selección chilena, como Tucu Hernández y Fabián Orellana. El bicampeón internacional chileno honró al club vigués con su presencia durante temporada y media llevándose el cariño de compañeros, club y afición.

Durante su etapa como jugador celeste ha podido dejar destellos de su calidad, aunque su inestable rendimiento -muchas veces provocado por sus lesiones- es lo que le llevó a abandonar la ciudad olívica. También conocido como "Chelo", contó con la confianza de otra figura conocida en Chile, el técnico Eduardo Berizzo, quien también abandonó el Celta al término de la campaña 2016\17, una temporada de ensueño para el celtismo de la que Marcelo fue partícipe.

Marcelo Díaz en su presentación con el R.C. Celta.
- Su historia comienza en uno de los clubes más grandes de su país natal. Díaz se inició en las categorías inferiores del Universidad de Chile, equipo con el que se convertiría en profesional en 2004 con diecisiete años. Entonces ya se apreciaba la figura de un futbolista con talento. Un chaval de corta estatura y algo rechoncho que manejaba el balón con una suavidad y clase asombrosa. Aquel joven se estrenaría en la alta élite del fútbol y jugaría para las secciones menores de la selección chilena, convirtiéndose así en un mediocentro defensivo de gran calidad y una técnica exquisita. Ese mágico toque de balón le hizo marcar auténticos golazos, como bien pudo demostrar en dos ocasiones como jugador del Celta de Vigo. Marcelo Díaz nos llegó a sorprender con dos golazos de tiro libre que curiosamente lanzó desde el mismo punto. Ahí se vieron las virtudes de este volante diestro que se empleaba con garra, esfuerzo y calidad. Ganó tal fama que llegó a jugar en dos de las ligas más potentes del mundo, la Bundesliga alemana y la Liga Española,... por no hablar de su experiencia a nivel internacional, figurando para la historia del fútbol chileno como un bicampeón americano que formó parte de una potente selección que contó con otros jugadores de la talla de Vargas, Valdivia, Alexis Sánchez, Aránguiz, Medel y los ya citados Tucu y Orellana. Con todos ellos y otros más, el "Chelo" Díaz ha escrito un nuevo capítulo de prestigio para la selección de Chile.

En 2005 debutó en Primera División con la Universidad de Chile, club en el que permaneció durante cinco años, en los cuales ganó el torneo de apertura de 2009. Estuvo un tiempo jugando cedido para Deportes La Serena, para después regresar a la entidad azul y así cumplir con un total de 164 partidos en los que anotó cuatro goles.
Sus magnificas actuaciones con el conjunto universitario le llevarían a ser objeto de deseo para varios clubes europeos, siendo fichado finalmente por el Basilea suizo, al que llegó en el verano de 2012 para permanecer allí tres temporadas.

Su gran rendimiento en la liga helvética le llevaría a debutar en la afamada Bundesliga alemana cuando ya era un destacado jugador internacional. Pero las frecuentes lesiones de rodilla no le dejarían triunfar con el Hamburger. Una torsión en su rodilla derecha el impediría jugar más de diecisiete partidos en la prestigiosa liga alemana, por lo que en el invierno de 2015 fue declarado transferible por los dirigentes del club de Hamburgo.

- En Vigo llevaban años suspirando por un mediocentro de cierta calidad que se encargase de las tareas defensivas y crease juego desde la medular. En el equipo ya se hallaba el joven Nemanja Radoja, un futbolista de tremendas condiciones que acabaría convirtiéndose en el codiciado centrocampista celeste y que competiría por el puesto titular con Marcelo Díaz, transferido al Real Club Celta en el mercado invernal del curso 2015\16.
El chileno ya se mostró muy ilusionado desde su presentación oficial con el equipo vigués. Entre el celtismo había dudas, ya que su lesión de rodilla no inspiraba demasiada confianza. No obstante, al Celta llegaría este internacional chileno que durante su etapa de celeste conquistaría su segundo título de la Copa de América, al mismo tiempo que competiría a gran nivel en la Liga Española.
Desde el principio contó con la confianza de Eduardo Berizzo y se unió a un vestuario de jugadores muy competitivos como Nolito, Iago Aspas, Jonny Otto, Wass y sus compatriotas ya citados con los que compartía vestuario en la selección. Es por ello que Marcelo no tardaría en calar en el vestuario celtiña, convirtiéndose con el paso del tiempo en un peso pesado de la plantilla que llegaría para trabajarse un hueco en la titularidad, algo que tampoco sería sencillo para el de Padre Hurtado.

Su debut de celeste se produjo el 4 de febrero de 2016, justo en el partido de ida de la semifinal de la Copa del Rey. El Celta se las vio con un Sevilla muy serio que se llevaría el partido por 4-0, lo que ya hacia presagiar la eliminación del conjunto vigués. Díaz solo tuvo tiempo a dejar restos de su calidad sobre el verde, aunque evidentemente era muy pronto para juzgarle en un partido que estuvo dominado por el Sevilla de principio a fin.

Tres días después llegaría su debut liguero, también contra la escuadra sevillana. El chileno tuvo casi media hora para convencer a la afición olívica y parece que muchos ya se frotaban las manos con su fichaje. Al serbio Radoja le había salido una dura competencia que dejó muestras de calidad ante un Sevilla de lujo que se llevaría un empate de Vigo (1-1).
Con la eliminatoria de Copa casi resuelta, "Chelo" tuvo noventa minutos para adaptarse al equipo. Cumplió con creces y poco a poco se fue ganando la titularidad hasta el final de Liga, llegando a jugar catorce partidos hasta final de temporada.

Durante el curso 2016\17 dejó un discreto rendimiento, pero marcó dos golazos, uno en Copa contra el UCAM Murcia y otro frente al Granada en Liga. El Celta se plantaría en dos semifinales por vez primera en su historia, pero sin la consecución de un merecido título tras su participación en la Europa League y en la Copa del Rey.

Momento en el que Marcelo Díaz ejecuta la falta que se convertiría en un bello recuerdo para la afición celtiña.

- La directiva celeste no vio clara la continuidad del mediocentro sudamericano, que según fue avanzando el mercado veraniego, se fueron estudiando varias ofertas que no llegarían a ningún puerto. Pero Marcelo no seguiría en el equipo vigués, y así lo confirmó despidiéndose de sus compañeros en la sesión de entrenamiento, así como por las redes sociales, las cuales utilizó para ofrecer una sentida despedida a la que fue su afición durante temporada y media.

El Pumas mejicano será su próximo reto. Habiendo participado en un total de cuarenta partidos de la Liga Española, Marcelo Díaz de va del Celta con la cabeza bien alta, dejando en el recuerdo dos golazos de falta que pusieron en pie a todo Balaídos en reconocimiento a esa calidad que le llevó a ganar dos Copas de América.