sábado, 10 de junio de 2023

Hugo Mallo: El gran capitán marinense.








- Hugo Mallo Novegil
- Nacido en Marín (Pontevedra), el 22 de junio de 1991
- Lateral derecho
- Equipos: R.C. Celta de Vigo \ R.C. Celta B.




- Se ha ido un grande, el último gran capitán que lució el brazalete durante muchos años, completando nada menos que 396 partidos de Liga con el Celta, 309 de ellos en Primera División. Entre todas las competiciones, Hugo Mallo ha sumado 450 partidos, por lo que Manolo Rodríguez sigue figurando como el jugador con más participaciones (533). 
Con su despedida, este lateral diestro ha renunciado a rebasar el récord marcado por Manolo, así como a guardar ese cartel de "One Club Man" que muchos pensamos que llegaría a cumplir. Tras 14 temporadas como céltico, ha puesto fin a su larga estancia por Balaídos.

Ejemplo para todos los canteranos, Hugo se ha despedido rodeado de celtismo, una marcha que aún se cuestiona la gente, aunque el jugador ya ha dado las explicaciones pertinentes. No descarta volver al club de su tierra, pero parece que tendrá que ser para ostentar algún otro cargo una vez se haya retirado. De momento, le queda fútbol por delante.

- Su fiel amigo y compañero de muchas batallas es Iago Aspas, quien ha pasado gran parte de su carrera a su lado, otro legendario futbolista que también bate récords en números, como máximo goleador histórico del R.C. Celta de Vigo.
A Mallo ya se le veían condiciones desde pequeño, cuando jugaba en el Salgueiriños C.F. Este lateral diestro nació en la localidad pontevedresa de Marín, el 22 de junio de 1991. Allí mismo creció antes de que se marchara a Vigo para ingresar en la cantera del R.C. Celta de Vigo previo paso por el Pontevedra.
Siempre brilló en la cantera de la entidad olívica. Era uno de los jugadores más prometedores de aquella generación en la que otros talentos como Sergio Álvarez, Dani AbaloMichu y el ya citado Iago Aspas, iban dando pasos agigantados hacia el primer equipo. Todo era cuestión de tiempo. Hugo se encargaba de la banda derecha defensiva, ejerciendo como un sacrificado zaguero con buen toque y osadía para afrontar el terreno rival. Mete buenos centros y sabe chutar a puerta con precisión, y es un jugador con casta, bastante bregador. Solo era cuestión de tiempo que el marinés subiera al primer equipo, y con dieciocho años recién cumplidos, Eusebio Sacristán le llamaría para acudir a sus primeras sesiones de entrenamiento con los mayores. Fue otro de los grandes descubrimientos del técnico vallisoletano en su etapa como céltico.

El Celta se hallaba en Segunda durante aquella campaña 2009\10 en la que carrileros diestros como Vasco Fernandes y Edu Moya tenían absoluto protagonismo. No obstante, la nueva perla celeste estaba a punto de aparecer.
Moya denunciaría al club por impago, lo que forzaría la convocatoria de un chaval que ya entusiasmaba con sus actuaciones en Barreiro. Ya en la pretemporada, el lateral marinés se ganaría la confianza del entrenador lo que causaría su ascenso directo al primer equipo.

Ya en la primera jornada, Hugo se preparaba para debutar con el Celta en competición. Fue en una visita del Numancia a Balaídos, en el que el joven alero tendría sus primeros minutos jugando por la banda izquierda, ya que tuvo que suplir al lesionado Roberto Lago. El partido acabaría con 1-2 para los sorianos.

En su siguiente aparición, el conjunto olívico afrontaba el torneo copero ante el Real Unión, evento en el que el joven zaguero tendría gran protagonismo. Lástima que la gran actuación celeste tendría fin en cuartos ante el Atlético, pues Hugo ya iba asimilando bastantes minutos.
A medida que fue cumpliendo con más partidos en el equipo dirigido por Eusebio, también iba asumiendo su rol internacional con la selección española Sub-19. También jugaría para el equipo Sub-20, con el que disputó el Mundial de Colombia 2011.

Mallo celebra uno de sus 12 goles con el Celta.
- Con el Celta salvado por los pelos del descenso a Segunda B, al club llegaría Paco Herrera, un entrenador que le daría confianza para ir ganándose la titularidad. Con el técnico catalán, Hugo sería imprescindible.
Hugo sería uno de los héroes del ascenso del equipo a Primera División. Habiendo disputado un total de 34 partidos, el que estaba a punto de convertirse en capitán, celebraría el principal objetivo del Celta al término de la temporada 2011\12.
Solamente las lesiones impedirían que Mallo sumase más apariciones en Primera, categoría en la que debutó el 18 de agosto de 2012, en una visita del Málaga que terminaría con derrota gallega por 0-1. Pese al mal comienzo, el equipo continuaría en la división de oro española.
En el siguiente curso, y con tan solo veintidós años, Hugo Mallo figuraría como el tercer capitán del equipo, ascendiendo al primer grado con la retirada de Borja Oubiña, quien cedería sus galones al lateral pontevedrés. Así es como Hugo empezaría su larguísimo capítulo como capitán celeste, con muchos años por delante para disfrutar de Primera División.

Hugo Mallo siempre fue un pilar fundamental en el vestuario del Celta. Disfrutó de muy buenos momentos con Eduardo Berizzo, técnico que devolvió al equipo vigués a las competiciones europeas. En la Europa League, el Celta alcanzó las semifinales, donde cayó ante el Manchester United de José Mourinho. En Copa también se llegaría a la misma fase.

Vendrían tiempos peores con la marcha de Berizzo. Otros entrenadores se harían cargo del banquillo de Balaídos, y todos ellos echarían mano del indiscutible capitán, quien iba a ser muy necesario para las fuertes tormentas que se avecinaban por Vigo.
En tiempos de pandemia, el Celta se metería en serios líos por no preparar el tramo final de una temporada que se reiniciaría con la situación del Coronavirus algo más normalizada. El equipo, entrenado por Óscar García Junyent, acabaría salvando la temporada "in-extremis", beneficiándose de otros resultados simultáneos para mantenerse en el primer nivel un año más.

Después llegaría el dulce impulso que Eduardo Coudet le daría al Celta, tomando el mando en medio de la campaña 2020\21 para conseguir enamorar de nuevo al público con el cuadro celeste. Fue una alegría efímera, puesto que al año siguiente se volverían a complicar las cosas, por lo que el "Chacho" acabaría perdiendo también su sitio en el banquillo. 

Hugo Mallo es el segundo jugador con más partidos jugados para el Celta, por detrás de Manolo.


- Hugo Mallo empezaría a caerse del once, ya que la forma física no respondía y tampoco ayudaba la cabeza. El lateral marinense empezó a cuestionar su continuidad en el club olívico, incluso dejaría caer su marcha en el mercado invernal del pasado curso 2022\23.
No cambiaría nada la llegada de Carlos Carvalhal, quien trataría de recuperar la mejor versión de Mallo en un año con altibajos que traería más disgustos a la sede celtiña. Una vez más, el Celta se metería en serios apuros cuando la permanencia parecía casi hecha. Una vez más, el conjunto celeste se tendría que jugar su posición en Primera en la última jornada de Liga.

Ante un Barça que nada se jugaba, los muchachos de Carvalhal se lo jugarían todo para imponerse por 2-1. Kevin Vázquez fue el dueño de la banda de Hugo, aquella que defendió durante tantos años con su brazalete de capitán. Hugo Mallo saltaría al césped para celebrar con sus compañeros la permanencia, la última gran batalla del alero marinense, ese capitán que ante todo Balaídos puso fin a su extensa carrera como jugador del Real Club Celta.

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