Renato Tapia: La casta peruana.

- Renato Fabrizio Tapia Cortijo

- Nacido en Lima (Perú), el 28 de junio de 1995

- Centrocampista

- Equipos: R.C. Celta de Vigo \ Club Sporting Cristal \ F.C. Twente \ Feyenoord de Rotterdam \ Willem II Tilburg.

- Cuatro temporadas duró este mediocampista peruano por Vigo, de momento, las únicas que ha competido en la prestigiosa Liga Española. Si algo no se le puede reprochar a Tapia, es el compromiso y la seriedad con la que ha defendido el escudo del Celta, donde se ha sentido muy a gusto.

Este jugador salió de su país muy joven, buscándose la vida para llegar lejos en el complicado mundo del fútbol. Tras varias pruebas, acabó en los Países Bajos, donde fue creciendo como miembro del F.C. Twente. Con este club debutó en la Eredivisie, donde también representó a Feyenoord y Willem II.

Internacional por la selección de Perú, siempre le dio mucha importancia al tema de representar al equipo nacional, para el que intervino en las ediciones de la Copa América Centenario, 2019, 2021 y el Mundial de Rusia 2018. Tal vez esa ansiedad de jugar con Perú le perjudicó en su larga estancia por Balaídos, por lo que a veces fue criticado. 

- Tiene los antecedentes de otros compatriotas como "Chemo" Del Solar y Juan José Jayo, quienes además jugaban en la misma posición. Ambos supieron estar a la altura con el club gallego, y Tapia no fue una excepción. 

Cortijo Renato Fabrizio Tapia nació el 28 de julio de 1995 en Lima (Perú). Apodado desde sus inicios como "Cabezón", inició sus andaduras en la Academia César Sussoni, del Colegio San Agustín. De ahí pasaría al sistema juvenil del Sporting Cristal, donde pasaría tres temporadas antes de recalar en Esther Grande. Ahí perfeccionó su proceso de formación.

Muchos ya le habréis visto jugar. Tapia no solamente sabe defenderse como mediocentro, pues también tiene actuado como defensa central, una demarcación en la que ya se lució durante su etapa en los Países Bajos. Digamos que donde mejor puede rendir es en el medio campo, pues pocas veces he visto centrocampistas que recuperen tantos balones en un partido. Es un auténtico pulmón que se entrega a fondo. Pero por si fuera poco, Renato también sabe disparar a puerta con precisión y potencia. Es músculo y cerebro a la vez.

En Rímac solamente podría jugar como juvenil, ya que a medida que iba creciendo con los equipos menores de la selección peruana ya era seguido de cerca por muchos exploradores del balompié europeo. Es por ello que pronto acabaría viajando a Europa, ya cuando alcanzaba la mayoría de edad.

Realizaría pruebas en Inglaterra, con clubes como el Tottenham Hotspur y Liverpool. No hubo suerte, así que Tapia se marcharía a Países Bajos, donde sí pasaría el examen con un Twente, para formar parte del equipo juvenil tras firmar contrato en agosto de 2013.

Aquel muchacho del que los médicos pensaron que no pasaría del metro ochenta, acabaría dando un estirón de seis centímetros más, desarrollando además una musculatura y forma física que le convertiría en imparable durante sus compromisos con el filial del F.C. Twente.

Destacó de tal manera con los menores, que Tapia no tardaría en contar para Alfred Schreuder, quien le haría debutar en la Eredivisie en agosto de 2014, en un partido ante el Cambuur que se saldaría con empate a un gol. El peruano seguiría teniendo más minutos con el conjunto profesional.

Tapia jugó cuatro años para el Celta.

- Fue alternando posiciones defensivas con las tareas de medio campo, mostrándose incluso bastante goleador en sus primeros pasos por la máxima competición neerlandesa, dejando su primera diana precisamente ante el Cambuur, que saldría derrotado de Enschede por un ajustado resultado de 2-1.

Aún marcaría cuatro tantos más, firmando un doblete contra el Go Ahead Eagles para ganar a domicilio por 1-3. En su primer año con el Twente, Renato habría dejado unos registros de 5 tantos en 17 apariciones.

Tras ofrecer un gran rendimiento en sus primeros pasos por la Eredivisie, varios equipos preguntarían por el mediocentro peruano, que en diciembre de 2015 pasaría a formar parte del Feyenoord por dos millones y medio de euros.

Con el conjunto de Rotterdam no tendría ese protagonismo del que anteriormente había gozado con el Twente. Es por ello que se le buscó un destino para jugar cedido, por lo que en mitad del curso 2018\19 recalaría en las filas del Willem II.

En Tilburg volvería a ofrecer una buena versión, la misma que ofrecería con su selección en la Copa América de Brasil. Entonces volvería al Feyenoord para disputar más partidos en la liga holandesa, los últimos como miembro de la entidad rojiblanca, que empezaría a escuchar ofertas por el centrocampista.

El Celta de Vigo llevaba tiempo detrás de Tapia, y sin finalizar el curso 2019\20 ya se preveía su fichaje por el club vigués, el que ya se oficializaría el 20 de julio de 2020, tras terminar una temporada marcada por el Coronavirus. 

Su debut en la Liga Española no tardaría en oficializarse. A las órdenes de Òscar García Junyent, el medio limeño jugaría como titular en un Eibar - Celta que se disputaría en Ipurua, el 12 de septiembre de 2020. El choque entre vascos y gallegos fue soso, y así lo reflejó el resultado gafas que quedaría marcado en el luminoso. 

Tan mal fue el curso de aquella campaña, que el Celta precisó del cambio de entrenador. En el banquillo de Balaídos se sentaría Eduardo Coudet, quien continuó confiando en el peruano, uno de los jugadores más comprometidos con el club. Con el nuevo míster se cambiaría bastante la dinámica, y el equipo acabaría salvando la categoría con mucho margen.

En la Liga Española, Renato Tapia cumplió con 110 apariciones como jugador del Celta.

- Los siguientes años no iban a ser fáciles para el celtismo, y tampoco para Renato Tapia. El problema de su renovación sería un problema constante, por lo que muchos empezarían a quejarse de un jugador que empezaría a tener problemas físicos. 

Aún así, el mediocampista seguiría partiéndose la cara por los colores celestes, siendo uno de los primeros en no borrarse de las complicadas citas que tuvo el Celta en sus cuatro años por Balaídos. Tapia siempre se esforzó en el campo y eso el público lo supo agradecer. 

Y llegó la temporada del esperado Centenario del R.C. Celta. Se inició una campaña ilusionante con Rafa Benítez, quien mucho no iba a contar con el peruano. Tampoco se vio un buen fútbol de la mano del técnico madrileño, mientras Renato fue dejándose la piel en cada aparición. Sin ser el mismo de antaño, el jugador colaboró en todo lo que pudo.

Gracias a la contratación de Claudio Giráldez el celtismo vio la luz al final del túnel. El joven entrenador le dio varias oportunidades para ir despidiéndose del celtismo, ya que Tapia nunca llegaría a un acuerdo con la entidad céltica. Tras cuatro temporadas, el "Cabezón" abandonaría la ciudad olívica.